domingo, 27 de marzo de 2016

Cautivos en la Frontera I: Sueños de libertad en la puerta del tiempo... por Eduardo Navarro

En una sociedad fronteriza, como la situada entre la nazarí y la cristiana de la Edad Media, la presencia de cautivos en ambos lados era una de sus características distintivas, así como la figura de los alfaqueques, buenos conocedores de la frontera, que eran los mercaderes especializados en negociar los rescates,  de hecho eran quienes ponían  en contacto a los familiares de los cautivos con sus amos, por lo general si había dinero por medio. 


Cautivos en la Frontera II: La Huida de Juan...por Eduardo Navarro

“Gabriel dijo a Adam: Este Arco es el Poder de Dios. Esta Cuerda su Majestad. Estas flechas son la cólera y el castigo de Dios infligido a sus enemigos…” 

Entres las armas usadas por los soldados que custodiaban la fortaleza se encontraban armas blancas como la jineta o la daga, así como ballestas como el “afranyi”, no obstante la preferida era el arco, ya que para el ejército del Islam todo creyente debe aspirar a tener arco y flechas, porque no tira el hombre, Dios es el que tira, es por ello que enseñaban a sus propios hijos a usarlo y cuidarlo. 

Cautivos en la Frontera III: El Aprendiz de Adalid... por Eduardo Navarro

La más antigua mención a escapar de los cautivos de la frontera nazarí-cristiana, se produce en el Tratado de Vasallaje, en el año 1310, entre el Emir Nasr y el Rey de Castilla Fernando IV, donde este último promete:

“Et si algun cativo fuxiere de la vuestra tierra a la nuestra e alguna cosa truxiere, quel cuerpo dél quito et lo que troxiere se puesto en rrecabdo et tornado a aquel cuyo fuere. Et estas cosas que sean guardadas tanbien de la nuestra tierra a la vuestra”

Cautivos en la Frontera IV: El Plan de María... por Eduardo Navarro

María, la madre de Juan, intuía que su vuelta del Reino de Granada había tenido una relación estrecha con Naima, su cautiva. Sentía un dolor profundo por la separación que había mostrado con su padre ¡Había estado tan ciega por el dolor por la pérdida de su hijo!.

Así que aquella noche no pudo dormir. Tenía un propósito claro, para ello ideó un plan que comenzó a poner en práctica esa misma mañana. Antes del amanecer despertó muy pronto a su hijo pequeño
-   Madre, todavía no es de día, ¿Por qué me levantas tan temprano?
-    Apresura, tenemos trabajo, vamos a preparar el regreso de Naima a su tierra

Cautivos en la Frontera V: La liberación de Naima... por Eduardo Navarro

Una semana más tarde, con el salvoconducto en la chiva, Juan recordaba la ilusión de Benito al entregarselo. Llevaba más de dos días tratando de localizar al Adalid Álvaro Martínez, así que en una de esas ventas a las afuera de la ciudad, donde se bebía buen vino de Xerez, lo encontró con sus hombres.

lunes, 21 de marzo de 2016

¡No pasarán! Vittorio Giardino

Buenas tardes. Hoy os traigo un nuevo cómic.

Nos encontramos con Max en plena guerra Civil, él se encuentra fuera de España pero descubre que un antiguo compañero a desaparecido y decide ir a Barcelona a encontrarlo. Volver a España hará poner su vida en peligro para averiguar toda la verdad sobre su compañero.